Composición del ayuntamiento de Bilbao durante el mandato de la Comisión Gestora municipal cuyo alcalde fue Pablo Barrera Ozamiz 09.09.1934 - 25.06.1935

El cese del Ayuntamiento democrático, elegido en abril de 1931, dio paso a una comisión gestora municipal nombrada por el Gobernador Civil. En la comisión gestora continuaron como corporativos los tres concejales conservadores del consistorio democrático: Pablo Acha Larrea, Juan Manuel Velasco Amírol y José María Olavarría y Martínez de las Rivas. A estos se añadieron los siguientes miembros del Partido Radical: Eduardo Vallejo (profesor de la Escuela de Náutica), Nemesio Díaz Lasaga (Industrial), Alberto Rosales (profesor de Lenguas), Antonio Ajuría (propietario e industrial), Agustín Planas (ingeniero y director del servicio técnico de fabricación de Altos Hornos), Agustín López Tapia (industrial), Jesús Aldámiz (capitán de la marina mercante), Pablo Barrera (industrial), Rufino Silván (médico y profesor de instituto), José Rubio (empleado), Román López (comerciante), Luis Tirado Merino (comerciante), Restituto Pazos (empleado), Juan Vivancos (contratista), Cándido Arnaiz (comerciante), Antonio Gómez Berruezo (comerciante), Luis Fatras (comerciante), Victor Fernández Tapia (comerciante), Ricardo Benito Costa (comerciante), Marcelino Martínez (comerciante), Asterio Cuenca (empleado) y Gabriel Masiell del Río. También formaban parte en representación de diversas corporaciones: Felicísimo Larrínaga, por el Colegio de Abogados, Manuel Badosa y Valeriano Balzola, por la Cámara Minera, Hilario Múgica Mondragón y Ricardo Zuricalday de Otaola y Arana, por la Cámara de la Propiedad Urbana. Por último, como independientes fueron designados: Antonio Córdoba, Ángel Otaola, José María Abrisqueta y Luís Antón.

Fue elegido como Alcalde Pablo Barrera Ozamiz. La elección de tenientes de alcalde y de las comisiones municipales fue más compleja, ya que algunos de los propuestos no reunieron los votos necesarios y el Gobernador Civil retiró el nombramiento a algunos concejales y los sustituyó por otros. Esta heterogénea composición supuso algunas propuestas polémicas. El 24 de octubre, Esteban de Calle Iturrino, propuso que el control político del Ayuntamiento estuviese en manos del Partido Radical y el administrativo lo compartiesen con los concejales corporativos, con esta propuesta quedaban en entredicho las afirmaciones de que la gestora municipal se podía considerar como un órgano únicamente administrativo para gestionar la ciudad.

El Gobernador dejó en suspenso el nombramiento de los concejales Juan Vivancos, Luis Fatrás, (El Noticiero Bilbaino señalaba que estos no habían aceptado el nombramiento por las relaciones comerciales que mantenían con el ayuntamiento) José Rubio y Cándido Ernaiz y nombró a Manuel Sanz Sagaseta de Ilurdoz, Esteban de Calle Iturrino (abogado), Esteban Rodil, Francisco Ugalde Goyeneche (Catedrático del Instituto), Manuel Lasa Luzón (Catedrático del Instituto), José Arriero y Pablo Gómez-Guadalupe.