El aire es una mezcla de gases que forman la capa exterior de la Tierra, compuesto principalmente por nitrógeno, oxígeno, argón, dióxido de carbono y vapor de agua (López-Bonillo, 1997).

Según la OMS, la contaminación del aire representa un importante riesgo medioambiental para la salud. Desde los años 50, la calidad del aire y la contaminación atmosférica han sido temas de primer orden en las políticas de los países industrializados. Las emisiones de dióxidos de azufre (SO2), de óxidos de nitrógeno (NOx), de partículas y de los compuestos orgánicos volátiles (VOC) han descendido en la mayoría de los países Europeos en las últimas décadas. La preocupación por los riesgos en la salud humana - aumento de las enfermedades cardiovasculares y respiratorias – derivados de los elevados niveles de partículas persisten especialmente en las áreas urbanas más pobladas (EEA, 2005).

En ambientes urbanos como Bilbao, es fundamental mantener un aire limpio para evitar problemas de salud a la población y a los ecosistemas, por lo que es necesario controlar y vigilar los niveles de contaminación del aire. El Gobierno Vasco se encarga de evaluar la calidad del aire, estando disponibles los datos y las series históricas de dicha vigilancia en su página web. En 1975 se instaló en el Gran Bilbao la primera Red Automática para el Control y Vigilancia de la Calidad del Aire, siendo la primera a nivel nacional y una de las primeras a nivel europeo (Gobierno Vasco).


Beatriz Fernández de Manuel