Barrio de Bilbao que forma parte del distrito de Abando y que se integró en la Villa en 1890, con la agregación definitiva de la antigua anteiglesia del mismo nombre.
En 1870 Bilbao logró fijar el área de la anteiglesia de Abando que necesitaba para desarrollar su primer ensanche. De esta forma, cuando éste se aprobó, en 1876, el límite entre los dos municipios quedó fijado en la alameda San Mamés. Abando trasladó su ayuntamiento a la plaza de la República (La Casilla), que junto al entorno de Zugastinovia y de Amézola centralizaron su nuevo núcleo de población. Inmediatamente, en la zona de Inadutxu –la más cercana al Ensanche- se fueron levantando distintas villas ajardinadas, como las del pintor Guezala, el maestro de obra Daniel Escondrillas o el propio Manuel Allende.
A partir de 1907, esta zona de Indautxu quedó integrada en la ampliación del Ensanche diseñada por Federico Ugalde, pero la zona tenía una especificidad que la diferenciaba de todas las demás: la presencia de un planeamiento previo. Se trataba de una parcelación particular, a partir de una calle previa (Gordoniz), y de una gran propiedad, la finca La Alberca Mayor de la familia Allende.
Esta fue definida y aprobada por el municipio de Abando antes de su anexión definitiva en 1890, y sus poderosos propietarios consiguieron que fuera mantenida en los proyectos posteriores. En su tramo central se abría en una pequeña plaza circular, la de Bombero Echaniz, dando lugar a una retícula muy sencilla, con cuatro calles que se cruzan en la plaza (Egaña, Aureliano Valle, Marcelino Oreja y Pérez Galdós). Además contaba con otra calle ligeramente separada de las anteriores: particular de Allende, hoy Manuel Allende, y que albergó las primeras villas destinadas a los cuatro hijos del promotor: María, Carmen, Plácido y José Allende Plágaro, todas diseñadas por Severino Achúcarro en 1898-1999.
El grupo tenía su propia lógica interna, y enlazaba con evidentes dificultades con las principales calles adyacentes, sobre todo la alameda de San Mamés, Autonomía, Gregorio de la Revilla, y la definición de la plaza de Indautxu. Durante las dos primeras décadas del siglo XX se fueron levantando residencias, llegando a nueve villas en el entorno de la calle Manuel Allende, y hasta dieciocho entre Gordoniz y la alameda de San Mamés.Se trató de una urbanización ajardinada de calidad, que continuaba la tradición de la del Campo Volantín, y competía con los ejemplos contemporáneos de Getxo (Neguri y Las Arenas).
La vinculación de la familia promotora con el arquitecto santanderino Leonardo Rucabado permitió que este autor realizara algunas de sus más importantes construcciones de la primera época. Destacaron los principales edificios públicos de la zona: la iglesia del Carmen (1907-1908) de estilo neo-gótico, la neo-mudéjar plaza de toros de Indautxu, encargo del marqués de Villagodio en 1908, y los Campos de Sport de Indautxu (1908-1909) que acogieron frontón, campos de tenis y polo, pista de patinaje y sala de fiestas.
Todos ellos han desaparecido o se han transformado, y lo mismo puede decirse de la arquitectura residencial, azotada por la especulación de las décadas de 1950 y 1960. Hoy sólo queda parcialmente en pie la de Tomás Allende (1910) en Simón Bolívar esquina Aureliano Valle, que fue rectorado de la Universidad del País Vasco.
José María Beascoechea