Pedro Mazas Torre fue hijo del comerciante Joaquín Mazas Mijares y de su esposa, Balbina Torre Aldecoa. Su abuelo paterno fue el maestro cántabro José Mazas Hondal y sus abuelos maternos fueron Hipolito Mariano Torre Ugartebide y María Dominga Aldecoa Salcedo.

De los hijos de Joaquín Mazas, Pedro Mazas Torre fue quien continuó su labor en Santa Ana de Bolueta. Casado con la tolosarra Juana Bandrés Zunzunegui, con la que no tuvo descendencia, fue gerente de esta empresa y luego presidente tras la muerte de Romualdo Arellano en 1873. Formó parte también de la junta directiva de la Compañía General Bilbaína de Crédito. En el censo electoral de 1864 aparece en el municipio de Abando con unas rentas superiores a los 40.000 reales, igual que su hermano Diego. Diez años más tarde ya figuraba entre los veinte mayores pudientes vizcaínos, por industria y comercio, como elegibles para el Senado en representación de la provincia de Vizcaya.

La participación de su padre en el Banco de Bilbao, heredada no sólo por él sino por su hermano y la empresa familiar (Viuda e Hijos de J. Mazas), se reflejó en sus  elevados depósitos en cuentas corrientes. En 1874 fue designado vocal suplente del consejo de esta entidad financiera, pasando a ser vocal propietario entre 1875 y 1895, momento en que dejó el cargo por motivos de salud.

Además de su actividad empresarial, también mantuvo una cierta actividad política, en la esfera municipal, siendo concejal del Ayuntamiento de Bilbao, presidido por Andrés de Isasi (marqués de Barambio), en 1872-73 junto con su cuñado Domingo de Ocharan. También fue concejal durante el breve periodo de la alcaldía de Ricardo Arellano en 1873.

En 1874, como consecuencia del establecimiento de una contribución extraordinaria sobre la propiedad urbana y el inquilinato, para sufragar los gastos de fortificación contra los carlistas, presidió la comisión de propietarios encargada de la distribución y cobro en la zona anexionada de Abando. Formó parte de la comisión preparatoria para la representación vizcaína en la Exposición Universal de París de 1878, en la que Santa Ana de Bolueta obtuvo una medalla de plata.

Tras la guerra simultaneó su cargo de presidente de Santa Ana de Bolueta con la de segundo teniente de alcalde de Bilbao (1877-78 y 1879-80). También formó parte de los fundadores de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Bilbao en 1886 y fue importante accionista del Banco de España en Bilbao. Sabemos que en 1892 era propietario de 10 casas con un total de renta estimada de 49.777 pesetas, entre las que destacaba la Casa del Pasaje o  Casa Mazas (18.800 pesetas de renta estimada), ocupando el noveno lugar en el ranking de propietarios  de inmuebles de Bilbao.

De acuerdo con los datos de su testamentaría, Pedro Mazas adquirió varias casas en Bilbao la Vieja y Casco Viejo, pero también solares en el Ensanche. Mantuvo también posiciones en los mercados bursátiles de Londres y París, además de los de Bilbao y Madrid, con una cartera en donde predominaban los títulos de deuda pública y las acciones de ferrocarriles. A su muerte, dejó diversos créditos concedidos con garantía hipotecaria sobre empresas en la zona de Tolosa (Guipúzcoa). Asimismo, mantuvo un importante paquete de acciones y de obligaciones de Santa Ana.

Con su muerte, acaecida el 7 de diciembre de 1901, sus bienes lo heredaron sus sobrinos.


Eduardo J. Alonso Olea