Con la aprobación de la primera revisión del Plan General de Ordenación Comarcal del Gran Bilbao en 1964 sostenía en este plan que era necesario revisar todos los planes parciales. La zona de Begoña era una prioridad al ser la zona de Bilbao más afectada por la reestructuración del plan comarcal. Los proyectos de los accesos a Bilbao por Begoña, los polígonos residenciales de Txurdinaga y Ensanche de Begoña unidos a la previsión de crecimiento de las zonas de Campo volantín, Uribarri y Santutxu hacían de Begoña una prioridad absoluta. Las previsiones eran las de construir en total hasta 138.000 viviendas en Begoña hasta el 2000. Además de ser calificadas como zonas de edificación abierta La Salve, Cristo, Zumalakarregi, Uribarri-Zurbaran, y Santutxu. Eran zonas que en pocos años quedarían saturadas. El plan infraestructural más importante sería el proyecto del puente de La Salve que uniría ambas márgenes de la ría, desde el túnel de Artxanda que beneficiaría también a la Alameda de Urquijo y a la Alameda Mazarredo. También se diseñaron nuevos centros comerciales, grupos escolares  e iglesias.

 En 1968 se aprobó por el consistorio bilbaíno el proyecto de reforma parcial de la zona de Deusto, Olabeaga y Zorroza, y es que esta zona se vería afectada por el proyecto del puente de Olabeaga y la autovía que arrancaba desde su estribo derecho atravesando la Avenida del Ejercito pasando por la calle del Arbol y Txakolí, cruzaba la vía del suburbano, la falda de Artxanda, bajaba la cuesta de Enekuri, cruzaba Monte Cabras y el túnel inferior hasta la campa de Asúa en la autopista. La dársena de Deusto que acababa de finalizarse sus obras modificaría sustancialmente el plan de ordenación dado que se preveía transformar todo el canal lo que planteaba un estudio a fondo del futuro urbanístico de la antigua zona de Deusto. Pretendieron para ello los técnicos municipales convertir la ría en su ramal desde el camino de Trauco frente a Euskalduna hasta el cargadero de mineral en la cabecera de Zorroza que unía los terrenos al norte de la ribera de Zorrozaurre con el área de Olabeaga haciendo que discurriese la ría por el canal. Incluso en el plan se preveía convertir este segmento de la ría en un gran vertedero en donde depositar la tierra de los movimientos de los barrios que se desarrollan alrededor de Bilbao.

 Al año siguiente se dio a conocer la aprobación en el mes de julio por el consistorio bilbaíno del ambicioso plan de reforma interior de la zona de Basurto San Mames, es decir, el plan parcial del futuro centro de Bilbao. El plan preveía dividir la zona en dos barrios con capacidad para ubicar a 20.000 habitantes. Se aprobó el proyecto de reforma interior de esa zona a pesar de que el Plan General de Ordenación Urbana lo calificaba como zona especial. Las instituciones que se veían afectadas por este plan habían tomado la decisión de radicarse en otras zonas fuera de Bilbao pero dentro de la comarca. Además se pretendió sacar de Bilbao el hospital de Basurto y que se estructurase en un solo edificio en la zona de Leioa junto a la Universidad. Este suelo de Basurto se revalorizaría y tendrían un uso residencial y equipamentales. Con la revisión de estos planes parciales se cumplía una de las premisas del PGOU.

Luis Bilbao