Bloque de viviendas en la confluencia de las calles Estraunza, Gregorio de la Revilla y Gran Vía, construido en 1967 según proyecto de los arquitectos Félix y José Luis Íñiguez de Onzoño, en colaboración con Germán Sotomayor. Esta obra obtuvo el Premio Pedro Asúa de arquitectura. Los arquitectos propusieron la ordenación de la totalidad de la manzana y desarrollaron el bloque con fachada a la Gran Vía, con un programa de viviendas de tipo medio alto.

Se trata de una composición geométrica rigurosa, pero no rígida, en la que predomina la horizontalidad, la sobriedad de líneas rectas y volúmenes nítidos, y en ningún momento pretende ser  mimética con el entorno.

Las líneas horizontales de los forjados y los antepechos de las terrazas (en vidrio traslúcido y madera) tienen el contrapunto vertical de varios módulos de miradores. Una aparente doble fachada se crea a partir de las alineaciones de la Gran Vía y los vuelos de los balcones-terraza, con una gran superficie acristalada que combina con el aplacado de granito albero. El remate superior de las chimeneas sobresaliendo en la cubierta le confiere su imagen característica hacia la Gran Vía.


Francisco J. García de la Torre y Bernardo I. García de la Torre