Es una edificación residencial compuesta por dos bloques que generan un frente edificatorio en la nueva Plaza Euskadi. Respetando los criterios historicistas del trazado decimonónico de la plaza elíptica (como ejemplo cercano la Plaza de Federico Moyúa), el proyecto adquiere cualidad contemporánea.
Mediante dos bloques de planta baja y ocho plantas superiores que flanquean por su lado Sur la torre Iberdrola, así como con su alineación en paralelo al Puente de Deusto, se confiere al proyecto el carácter emblemático propio de un emplazamiento singular.
La volumetría queda definida por el tratamiento de la envolvente exterior, modulada por unas costillas estructurales en toda su altura. El proyecto fue desarrollado por los arquitectos Carlos Ferrater, Luis Domínguez y Xavier Martí, concluyendo las obras en 2011.
En ambos edificios se plantean las viviendas pasantes (a dos fachadas opuestas), que mejoran su orientación, permiten ventilación cruzada y mayor iluminación natural. Hay viviendas de 1, 2 y 3 dormitorios, así como en dúplex (dos alturas).
Los edificios se vacían a partir de determinada planta, dotándolos de espacios de uso privado o semi-privado, generando visuales y perfiles diversos hacia la plaza o hacia la Ría. La fachada se modula a través de las costillas estructurales verticales revestidas de latón sulfurizado que, a su vez, generan el pórtico en planta baja. El control térmico se realiza con revestimientos modulares.
Francisco J. García de la Torre y Bernardo I. García de la Torre