Actual distrito municipal número ocho orientado al Suroeste en la margen izquierda de la ría, con los barrios de Basurto, Olabeaga, Altamira, Masustegi-Monte Caramelo y Zorrotza.

Al igual que sucede en otros distritos de Bilbao, en este caso existen barrios claramente diferenciados que lo configuran con personalidad propia. En Basurto pueden distinguirse varias épocas en su desarrollo histórico. La primera a partir del s. XV con las referencias al Convento de los Franciscanos de San Mamés erigido sobre una antigua ermita de la misma advocación en el lugar hoy ocupado por la Casa de Misericordia; una Casa torre donde se ubica el Hospital Civil construido en 1900 y el Convento de Capuchinos.

Pero el inicio de su gran transformación tiene lugar a finales del s. XIX con el desarrollo industrial en el que adquirió especial protagonismo la ría y la zona portuaria e industrial de Olabeaga y San Mamés con los espacios destinados a astilleros. Por su ubicación era zona de paso de las comunicaciones terrestres desde Bilbao hacia su entorno próximo (Portugalete, Sestao, Santurtzi  por una parte, y las Encartaciones por otro) y más alejado (Castro Urdiales, Santander y el resto de Cantabria).

En la primera mitad del s. XX se fueron sucediendo los planes de ampliación del Ensanche, la construcción de dos urbanizaciones de casas baratas (Santiago y Santa Ana), los Cuarteles de Garellano después ocupados por la Policía Municipal y dotaciones como el Centro de Desinfección, el Depósito de Materiales Peligrosos e Inflamables, la Cervecera del Norte y el Estadio de San Mamés sucesivamente ampliado.

En la segunda mitad de ese mismo siglo se construyó la Escuela de Ingenieros Industriales y la Feria de Muestras, después ampliada y finalmente demolida y trasladada a Barakaldo (BEC), todo ello en San Mamés.  En definitiva un ámbito urbano que ha ido acogiendo grandes equipamientos urbanos. Sin olvidar la urbanización residencial de Bentazarra proyectada en los años ochenta.

El Plan General de Ordenación Urbana de Bilbao de 1995 planteó unas claras directrices para la zona, consolidando un campus tecnológico universitario con la nueva Escuela Universitaria de Ingeniería Técnica Industrial de Bilbao y la nueva Escuela Universitaria de Ingeniería Técnica de Minas y de Obras Públicas, el nuevo Estadio de San Mamés, el área residencial de Garellano y los nuevos accesos por Olabeaga con la demolición del viaducto de Sabino Arana. Y además el cubrimiento de la trinchera y el soterramiento de las vías del ferrocarril entre Basurto y Ametzola.

Por otra parte, Zorrotza perteneció a la anteiglesia de Abando hasta su anexión a Bilbao en 1890 y está configurado por una peculiar península con forma triangular ubicada en la margen izquierda de la ría junto a la desembocadura del río Cadagua. A lo largo de su historia cabe distinguir varios aspectos que han tenido especial relevancia, destacando las comunicaciones terrestres, al ser un auténtico cruce de caminos desde Bilbao por Basurto (a Balmaseda por el alto de Castrejana, y a la Margen Izquierda Castro Urdiales y Cantabria por Burceña);  además el transporte de mercancías marítimas hacia Portugalete y Deusto; y a partir de finales del s. XIX el transporte ferroviario hasta Portugalete y Somorrostro por el borde de la ría, y hasta Balmaseda, y Santander desde Zalla por el interior.

Citado en la Carta Puebla de 1300 como límite de la jurisdicción de Bilbao, hay posteriores referencias documentales de antiguos linajes medievales, astilleros e instalaciones portuarias al borde de la ría donde se va concentrando la población, siendo escasa, dispersa y rural en el resto de su jurisdicción. Entre los Ss. XVI y XVIII consta la existencia  de varias edificaciones religiosas.

Merece especial atención el Astillero y Arsenal Real de la Armada española que estuvo funcionando desde el s. XVII hasta el s. XIX y la proximidad con Olabeaga que ha tenido su influencia en diversas actividades portuarias.

A finales del s. XIX y comienzos del s. XX se originaron profundos cambios  por efecto de la industrialización. Las minas de Castrejana y Arraiz tenían cercana su salida al mar a través de los cargaderos de mineral en la desembocadura del río Cadagua en Zorrotza. También se instalaron numerosos pabellones industriales de diversa índole, destacando por su interés arquitectónico los Molinos Vascos en el borde de la ría.

Aunque se plantearon diversos proyectos de ampliación del Ensanche, entre los años cincuenta y setenta del s. XX imperó la especulación urbanística, perviviendo anteriores muestras aisladas de actuaciones residenciales como los grupos de Casas Baratas de la Amistad y de la Antigua Jabonera Tapia en Zorrotza y el de Obreros de Echevarría en Castrejana.

En el barrio se distinguen varias zonas: el Puntal, la plaza de San Miguel, centro de Zorrotza y las laderas de Castrejana.

Francisco J. García de la Torre y Bernardo I. García de la Torre