Desde 1950 hasta 1975, en la prensa escrita bilbaína, hubo una serie de posicionamientos, entre los que se discutía en torno a la necesidad de un nuevo modelo de ciudad. Pero que estuviese inspirado en aquellas ideas que plasmaron, sobre todo, los periodistas de Bilbao que se desplazaron como enviados especiales a los Estados Unidos. Estos quedaron totalmente fascinados con lo que vieron, con lo que experimentaron y dicha fascinación la trasladaron a través de una serie de artículos a todos los vizcaínos.

 Desde Bilbao, en 1950, fue a través de El Correo Español/El Pueblo Vasco, y del enviado especial José Luis Barcelo y su serie titulada “Mi viaje a los Estados Unidos”. Una serie de artículos en los que describía su industria, su economía, precios y salarios, política interna o las metrópolis de Nueva York y Pittsburgh. Otros enviados especiales del mismo diario, como Augusto Assia o Adolfo Echevarria, a Nueva York, que fueron ese mismo año, enviaron una serie de artículos sobre las universidades norteamericanas o sobre su modo de vida.

 En el mismo diario, Francisco Lucientes publicaba “Los Estados Unidos de hoy” sobre el extraordinario poder de este país o Luis Hernández Franch lo hacía sobre “The National Bureau of Standars”, en torno a la estandarización de la vida americana.

 Mediados los años 60 el diario Hierro fue más allá y propuso como solución al problema de la vivienda los sistemas americanos que proponían montar casas en cadena. Planteaban reproducir propuestas en vivienda experimental de Buckmeinster Fuller (Wichita House). También se propuso para Bilbao porque no reproducir el modelo de Chicago del Plan Bertrand Goldberg 1959-1964, con varias torres de 60 plantas con un uso mixto residencial y centros comerciales, auditorio y hotel que ocupaban una manzana barrio residencial Marina City en la periferia. Se propuso en este mismo diario incluso reproducir la ciudad experimental de Minnesota planteada por Athestan Spilhaus en Estados Unidos. La prensa bilbaína, que en un principio solamente publicaba los artículos de sus enviados especiales sobre sus experiencias pasó en los años 60 y 70 a ir más allá al tratar de reproducir, tanto su política constructiva de viviendas prefabricadas como algunos de sus hitos arquitectónicos y de infraestructuras, sus modelos de ciudades del futuro…La idea fue hacer de Bilbao una nueva ciudad a imagen de las norteamericanas, a través de un nuevo simbolismo arquitectónico y como solución a muchos de sus problemas.