El Palacio Escauriaza, situado en el número 71 de la Gran Vía de Bilbao, fue utilizado por el Gobierno Provisional del País Vasco durante la guerra civil. Era un edificio residencial propiedad de la familia Escauriaza. Poco después del comienzo del conflicto, el Gobierno Vasco decretó la expropiación forzosa y sin indemnización de los bienes de Dámaso Escauriaza Ipiña, propietario del inmueble en cuestión.

Proyectado por el arquitecto Leonardo Rucabado, era un edificio de grandes dimensiones, cuyos terrenos albergaban un velódromo, lo que da una idea de su tamaño. En la entrada del palacio había una columna de mármol de Ereño. De estilo ecléctico, en el palacio Escauriaza se unen diferentes influencias arquitectónicas europeas. Tenía tres pisos y una torre redondeada en una de sus esquinas.

 Allí se instaló el Departamento de Sanidad que dirigía el político de Unión Republicana Alfredo Espinosa Orive. El departamento estuvo en el palacio entre los meses de noviembre de 1936 y junio de 1937, cuando fue evacuado. En un primer momento el departamento iba a ser instalado en la finca Estraunza, pero fue el pabellón de consultas del Hospital de Basurto el lugar en el que se situó provisionalmente, hasta que el Palacio Escauriaza estuvo adecuado.

Además de ocupar este edificio, algunas alas del departamento estaban en otros lugares de la villa. La Inspección General de Odontología, por ejemplo, estaba situado en la calle Sendeja nº3, sede del Colegio Oficial de Odontólogos.

Dentro de la finca que ocupaba el Palacio Escauriaza se habilitó un edificio como almacén de productos farmacéuticos y como garaje.  El palacio albergó las secretarias del Departamento de Sanidad o la Sección de Defensa de la Población Civil contra ataques aéreos, entre otros organismos.

Otros edificios emblemáticos de Bilbao fueron utilizados como sedes de diferentes ramas del Gobierno Vasco durante la guerra. Fueron el Villa Mena, la Sociedad Bilbaína, el Banco de Comercio, el Palacio Ibaigane, la sede de la naviera Sota-Aznar, la Equitativa, el Hotel Carlton, el edificio Chávarri, y el Chalet Estraunza.

Tras el final de la guerra civil, el Palacio Escauriaza fue utilizado como centro de reclusión para republicanos. Más tarde, en 1943, se instaló en el mismo el colegio religioso Pureza de María. Finalmente, el edificio fue demolido en la década de los sesenta. Actualmente es un edificio residencial con oficinas y comercios en la parte baja.  


Antón Pérez