La Sociedad de Metalurgia y Construcciones La Vizcaya fue constituida en Bilbao el 22 de septiembre de 1882 por Antonio de Olano e Iriondo, Benigno de Salazar y Mac Mahón, Juan de Durañona y Arrarte, Víctor Chávarri y Salazar, Benigno Chávarri y Salazar, Pedro P. Gandarias y Navea, Federico de Echevarría y Rotaeche, José Mª San Martín Allende y J. Emiliano de Olano y Loizaga. Su primer gerente fue Víctor Chávarri, que llegaría en1892 a la presidencia.

La sociedad se fundó con un capital social de 12.500.000 pts. aunque inicialmente sólo se desembolsaron 625.000 pts. El lugar elegido para el establecimiento de la fábrica fueron las Marismas de Sestao (con 1.500.205 m2, y por el que pagaron 550.000 pts.)muy a propósito porque tenía cerca las minas (con el Ferrocarril de Galdames al lado) pegado a la ría y así se descargarían las materias primas fácilmente.

La fábrica fue inaugurada el 18 de julio de 1885. El 17 de junio de 1885 se había encendido el primer horno alto y el segundo el 8 de diciembre. Ese año produjo 10.117 toneladas de arrabio, la mayoría procedentes del horno nº 1.

En 1886 se instalaron sucesivas baterías de hornos de cok, con una producción diaria de 250/300 tn., alcanzando una producción de 50.000 toneladas en 1889 y casi 100.000 toneladas en 1891. Para 1886 La Vizcaya era la mayor productora española de lingote. En principio estaba previsto que para la primavera de 1889 se pudiera efectuar la fabricación de acero Martín-Siemens y operativa la instalación de laminación, pero para la fabricación de carriles se tuvo que utilizar el procedimiento “Robert”. Para la fabricación de otros hierros comerciales (fleje) se instaló otro tren de laminación pequeño y hornos de pudelado (1890-1891).

Para 1893 La Vizcaya tenía una capacidad productiva de 60.000 toneladas anuales de acero y de unas 5.500/6.000 toneladas de hierro pudelado. Para transformar esta producción contaba con seis trenes de laminación (3 grandes y 3 pequeños). Sin embargo, toda esta capacidad no pudo ser aprovechada por la crisis del mercado, tanto interior como, sobre todo, exterior.

En 1888 se llegó a un acuerdo con la sociedad Goitia y cía. (constituida el 8 de junio de ese año)  para venderle una parte del terreno en donde Goitia levantaría una fábrica de hoja de lata garantizando un consumo a La Vizcaya de 20.000 toneladas anuales por 107.892,15 pts pagaderas en cuatro plazos (1892-1895) al 4% de interés.

Una vez fallecido Chávarri, La Vizcaya, Altos Hornos de Bilbao y La Iberia acordaron en 1902 su fusión en lo que fue Altos Hornos de Vizcaya.

Eduardo J. Alonso Olea