El mes de mayo de 1937 fue en el que se registró un mayor número de bombardeos aéreos sobre Bilbao. En 15 días diferentes la villa sufrió los ataques aéreos, en algunas ocasiones repitiéndose dichos ataques varias veces en la misma jornada. Los días en los que Bilbao fue bombardeado fueron los siguientes: 1, 3, 6, 10, 12, 13, 15, 16, 21, 23, 24, 25, 26, 28 y 29. Como se puede ver, al final del mes los ataques se recrudecieron, repitiéndose casi a diario.

Los bombardeos de mayo afectaron a Abando, Begoña, el Casco Viejo y el puerto, además de las inmediaciones de la villa, donde el frente era cada vez más cercano al casco urbano bilbaíno. Debido a lo difícil de la situación, pudiéndose observar lo inminente de la llegada de las tropas franquistas, se dispone de menos información en lo relativo a la destrucción causada por los bombardeos, tanto material como humana.

Los aviones alemanes “Junker Ju52”, “Heinkel He52” y “Messerschmitt Bf.109”, así como los italianos “Savoia Marchetti SM.79”, fueron los que habitualmente llevaron a cabo las operaciones de bombardeo.

En cuanto al número de víctimas que produjeron, si bien actualmente es imposible dar una cifra concreta, y no se dispone de fuentes conocidas que puedan dar una respuesta definitiva a dicha pregunta, en los diarios de inhumaciones de los cementerios de Bilbao se registraron 19 personas durante el mes de mayo cuya causa de la muerte era “bombardeo”.  La cifra fue probablemente más alta, aunque no se puede afirmar con rotundidad. En este mes de mayo un porcentaje muy alto de los muertos que se registraron tuvieron como causa de la muerte “heridas de guerra”, y es posible que algunos de estos murieran a causa de las bombas.

Mayo fue el último mes completo de guerra en Bilbao. El día 19 de junio las tropas franquistas entraron en la ciudad y tomaron el control. Así, mayo fue el mes en el que más ataques aéreos se registraron, y Bilbao, la ciudad más bombardeada de el País Vasco. Este dato no es extraño si tenemos en cuenta su importancia industrial, la gran cantidad de población que aglutinaba y el hecho de que fuera la última zona en caer en manos de los sublevados.