Ante la futura expansión de Bilbao, prevista tanto en el Plan de Urgencia Social de Bizkaia de 1959 como en la primera revisión del Plan General de Ordenación Urbana de Bilbao y su área de influencia de 1961, hacia el Valle de Asúa, como lugar de emplazamiento del futuro Bilbao, se realizó un informe técnico previo sobre sus posibilidades, que fue positivo. Era la respuesta a la saturación de Bilbao, al difícil relieve topográfico, al incesante crecimiento demográfico y la gran concentración industrial además de a la escasez de solares –tan solo quedaban para 250 edificios-, los precios eran exorbitados y con un ritmo constructivo de viviendas extraordinario, por lo que era la única posibilidad de extenderse de Bilbao.

 Seguidamente se convocó entre urbanistas un concurso de ideas a fin de buscar el mayor asesoramiento entre urbanistas de prestigio internacional. Este se dotaría de cuantiosos premios a fin de estimular la participación y se aplicarían las más modernas orientaciones urbanísticas.

 Tras el estudio urbanístico de la comarca se envió a los participantes planos, fotos, maquetas, junto a una maqueta a escala 1.2000 y una memoria explicativa. Hasta entonces solo había habido soluciones parciales por parte de los municipios del Gran Bilbao pero con este proyecto se buscaban una planificación en conjunto con soluciones colectivas.

 Con esta urbanización del Valle de Asúa se duplicaba la superficie de Bilbao, aportaba 412,3 km2 y abarcaba los municipios de Zamudio, Derio, Sondika y Loiu (Lujua).

 El jurado estuvo compuesto la presidencia por Lorenzo Hurtado de Saracho, de vocal Ángel Galíndez, los arquitectos Manuel Romero Aguirre (Asís Cabrero), Antonio Perpiña (German Aguirre), José Sans Gironella, Plinio Marconi, Andre Gutton y Robert Auzelle. Como asesor Luis Lorenzo Blanc y como secretario Eugenio Aguinaga. El plazo de presentación terminó en Mayo de 1962 y en Junio el fallo del jurado. En total fueron 57 proyectos y el primer premio fue para el proyecto de Julio García, Valentín Rodríguez y Alfonso Soldevilla.

 Plantearon una ciudad para 120.000 habitantes subdividida en tres barrios. El jurado lo tachó de aciertos en el acoplamiento al lugar y en la utilización del terreno con una zonificación que manifestaba una buena estructura de núcleos urbanos e interesantes emplazamientos de los servicios públicos con una buena integración de los espacios verdes. La red viaria estaba bien acoplada y el esquema general bien organizado. La disposición de los accesos era buena y las viviendas se conjugaban bien entre edificios públicos y espacios libres. Lo más difícil fue buscar la solución más óptima para la conexión racional del Valle con Bilbao.

 Finalmente en 1964 tanto los ganadores del concurso García, Rodríguez y Soldevilla como los premiados con un accésit los bilbaínos Pedro y Javier Ispizua, además del arquitecto del Gran Bilbao, José Sans Gironella, presentaron un plan especial general de la zona residencial de Asúa que unía todas las ideas más interesantes del concurso. El 25 de Noviembre de 1965 fue aprobado por el presidente de la comisión ejecutiva del Gran Bilbao y alcalde de Bilbao el avance del plan de ordenación urbana del polígono de Asúa. Sobre este valle se erigiría una nueva ciudad satélite y residencial para 150.000 habitantes quedándose en el Bilbao original los edificios de servicios.

 

 

Luis Bilbao