El industrial y político monárquico Juan Tomás Gandarias Durañona nació en Portugalete el 8 de marzo de 1870. Era el primer hijo de Pedro Pascual de Gandarias y Navea, [Arratzu (Bizkaia), 22.10.1843 / Bilbao, 14.02.1901] propietario minero natural de Arratzu (Bizkaia) y de Victoria Durañona y Santa Coloma, [Santurtzi (Bizkaia), 9.08.1840 / Bilbao, 28.04.1925], hija de un destacado propietario de minas vizcaínas. Juan Tomás se casó con Cecilia Urquijo y Ussía, hija del Marqués de Urquijo, con la que tuvo siete hijos. Murió en su casa de Portugalete a la edad de 70 años, el 17.07.1940.

Tras finalizar sus estudios de bachillerato en el Instituto de Bilbao en 1888 inició sus estudios de derecho en la Universidad Central de Madrid. Obtuvo la licenciatura en la rama de derecho civil y canónico en 1893 y en 1896 el título de doctor en derecho civil y canónico.

No se dedicó profesionalmente al derecho sino que se dedicó a la gestión de las empresas industriales y mineras en las que su padre tenía invertida la fortuna de la familia. Fortuna que aumentó gracias a su carácter emprendedor.

Abarcó diversos sectores, comenzado con el minero, fuente de la fortuna familiar, ya que explotó varias minas de hierro en la zona de Triano, Ollargan, Somorrostro y Bilbao, además de otras en Baranbio (Álava) y Almería. También participó en diferentes sociedades (Argentífera de Córdoba, la Anglo Vasca de Minas de Córdoba, Alcaracejos, Los Almadenes o La Romana) creadas para explotar los yacimientos de plomo de la provincia de Córdoba.

En el sector siderúrgico participó en las negociaciones para la configuración de Altos Hornos de Vizcaya en 1902, de la que también fue consejero. Fue presidente de Talleres de Deusto y la S.A. Basconia. Formó parte de los consejos de administración la Sociedad Metalúrgica Duro Felguera, la Sociedad Española de Construcciones Metálicas y otras más. Fue vocal del Banco Urquijo Vascongado, consejero de la Banca López Bru, Banco Central y del Crédito de Unión Minera. En el sector químico fue vicepresidente del consejo de Unión Española de Explosivos entre 1906 y 1939. En el ámbito del transporte, formó parte del consejo de la Compañía de Navegación Vasco Asturiana, de la Compañía de Ferrocarriles de Amorebieta a Guernica y Pedernales y vicepresidente de la de Bilbao a Portugalete, llegando a ser uno de los fundadores de la compañía aérea Iberia en 1927. En el sector energético fue accionista de Hidroeléctrica Ibérica y Electra de Castilla, así como en la Refinería de Petróleo de Gijón, más adelante integrada en CAMPSA.

Por la importancia en su vida política, fomentó la industrialización de la localidad de Gernika-Lumo, Fue fundador de la fábrica de leche condensada Los Pirineos, S.A., de Talleres de Gernika S.A., Joyería y Platería de Gernika, S.A. y de Cerámica de Murueta, S.A., así como del hotel de la isla de Txatxarramendi.

Fue socio personal de la Liga Vizcaína de Productores entre 1894 y 1904. Presidió la Liga Nacional de Productores y en 1923 fue uno de los fundadores de la Federación de Industrias Nacionales. Fue miembro del Círculo Minero de Bilbao desde 1895, y su presidente entre 1901 y 1904.

Su trayectoria política estuvo vinculada al monarquismo alfonsino conservador. Fue Diputado por Gernika (Bizkaia) entre 1896 y 1915, en que fue nombrado Senador Vitalicio y por lo tanto estuvo en el senado hasta 1923.

Eduardo J. Alonso Olea