La tradicional regata anual entre Ingenieros y Deusto es un acontecimiento social y deportivo que se celebra desde 1981. Su promotor fue el ingeniero industrial José María Gorostiaga que desde la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Bilbao lanzó el desafío a la Universidad de Deusto.

Desde sus orígenes ha sido una competición de remo amateur con ocho bogadores y un timonel. Se recorren 4 millas (7.408 metros) desde Erandio hasta el Ayuntamiento de Bilbao en seis largos: Lutxana, Zorroza, La Ribera, Astillero, Abando y Uribitarte; y cinco curvas: Elorrieta, El Cargadero, Olabeaga, La Universidad y La Salve.

Además de celebrarse en primavera, normalmente el Domingo de Ramos –de ahí el famoso eslogan Domingo de Ramos, Domingo de Remos–, el reglamento dispone que no se conceda ningún premio al ganador. El vencedor de esta popular prueba únicamente levanta la famosa bandeja de plata de la Regata, donde año a año se anota el resultado. Ingenieros, que viste de azul, lleva 14 victorias, frente a las 21 que atesoran los tomateros de Deusto. A pesar de todo, el mejor tiempo lo alcanzó Ingenieros en 2014: 22 minutos y 51 segundos.

En 1995 se instauró lo que se conoce como desafío. Se trata de un acto festivo celebrado en el Café Iruña en el que la tripulación perdedora del año anterior desafía a su oponente a un nuevo encuentro. En lugar del un guante se lanza un remo. Desde 1998 un padrino o madrina acompaña a cada tripulación para dar fe de dicho desafío.

Después de cada regata tiene lugar la comida de Hermandad en la Sociedad Bilbaína. El menú que degustan ha permanecido invariable desde hace años. Se compone de porrusalda ilustrada, pisto a la bilbaína, bacalao al pil-pil, chuleta de ternera lechal con patatas y pimientos y de postre soufflé Alaska.


Ale Ibarra Aguirregabiria