Uno de los Hospitales Generales situados en Bilbao durante la guerra civil fue el instalado en la Plaza de Toros de Vista Alegre. El improvisado centro disponía de dos salas, siendo una la original de la propia plaza de toros. Tenía además un laboratorio, dos instalaciones completas de esterilización y todo el material y la infraestructura necesarias para las operaciones quirúrgicas más difíciles y delicadas.

Este centro estaba dirigido por el médico Vicente San Sebastián, que era el cirujano de la plaza y fue también presidente de la sociedad El Sitio de Bilbao. Era su ayudante Francisco Jiménez Lauben. La plaza de Vista Alegre fue utilizada como hospital desde finales de 1936 hasta junio de 1937. Después de la guerra, mantuvo su uso como plaza de toros, en la que se realizaron diferentes festejos. Se utilizó para el homenaje de los caídos y heridos, así como para sufragar los gastos del Santo Hospital Civil o de la Santa Casa de Misericordia, dándole un tinte político al toreo