Santiago Baldomero José Vicente Villasante Anchústegui nació en Amorebieta en 1852. Hijo de José Villasante, natural de Cádiz, y de Juana Anchústegui, nacida en Bilbao. Se trasladó a Bilbao desde su Amorebieta natal en 1876. Se casó el 15 de octubre de 1877 con Rita de Orúe y Müller con la que tuvo 11 hijos.
Baldomero Villasante fue abogado, colegiado en el Colegio de Abogados de Vizcaya desde mayo de 1879. Su carrera profesional estuvo estrechamente ligada al negocio minero. Fue secretario del Consejo de Administración de la compañía Minera Urallaga y la Magdalena en 1922. Asimismo, participó como socio fundador en empresas como la Compañía Española de Asfaltos Naturales de Maeztu (1899), el Sindicato Vizcaíno de Minas (1901) y el Banco Naviero Minero, domiciliado en un primer momento en la plaza Circular y trasladado con posterioridad al Arenal. También fue asesor legal, entre otras empresas, de la Compañía del Tranvía de Bilbao a Santurce.
Baldomero Villasante, candidato liberal por el distrito de Gran Vía, fue elegido alcalde de Bilbao el 01.01.1902, tras unas elecciones en las que los liberales bilbaínos no obtuvieron una clara mayoría, lo que generó un mandato plagado de conflictos. El primer desacuerdo al que se enfrento el nuevo alcalde de Bilbao fue la discusión iniciada por los representantes nacionalistas al oponerse a que el Ayuntamiento sufragase la celebración del 2 de mayo. Después de acalorados debates, el Ayuntamiento acordó no sufragar los gastos del homenaje.
Durante el corto mandato de Villasante, el consistorio bilbaíno inició numerosos proyectos. En el ámbito de la enseñanza, se aprobó, el 15 de enero de 1902, la creación de una escuela intermedia entre la Escuela de Ingenieros y la Escuela de Artes y Oficios, que se denominó Escuela Oficial de Capataces Facultativos de Minas; también ese mismo año comenzaron las obras del grupo escolar La Perla. En el apartado de obras públicas podemos destacar la construcción del puente de Sendeja. A pesar de que el Ayuntamiento había aprobado la construcción de un puente fijo en Sendeja, al final, debido a las presiones de los ciudadanos al final se tuvo que optar por un puente móvil para facilitar así la navegación de las embarcaciones por la ría de Bilbao. Otro de los temas importantes que se abordó en el Ayuntamiento de Bilbao durante el mandato de Villasante fue la construcción del parque de Albia. La construcción de dicho parque suponía la expropiación de terrenos y la prolongación de la Gran Vía, lo que provocó acaloradas discusiones entre los grupos políticos. Asimismo, durante se mandato se finalizarían las obras del cementerio de Vista Alegre, en Derio.
Tras ocho meses de mandato, el 8 de agosto de 1902, Baldomero Villasante renunció a su cargo. El detonante de dicha renuncia fue un conflicto con los concejales nacionalistas a raíz de un manifiesto remitido por éstos al buque argentino “Presidente Sarmiento”. El Gobernador Civil, tras denuncia del alcalde, consideró que el manifiesto constituía “un deseo manifiesto de separación de la madre patria” y por tanto los concejales fueron destituidos. Estas destituciones supusieron un desequilibrio de fuerzas dentro del consistorio. Desequilibrio éste que fue aprovechado por la minoría dinástica, que consiguió que Pedro Pascual Bilbao Arrola accediese a la alcaldía.
Eduardo Alonso Olea