La escultura de homenaje al músico Aureliano Valle Tellaeche fue realizada por el escultor Quintín de la Torre (1877-1966) y se encuentra ubicada en el Parque de Doña Casilda Iturriza.

Aureliano Valle Tellaeche (1845-1918) desarrolló una intensa labor musical en el Bilbao de entresiglos. Fue compositor, concejal, organista, profesor en el Asilo de San Mamés y director de la Sociedad Coral de Bilbao, en estos dos últimos cargos sin sueldo, aunque compensado con el reconocimiento del público. Asimismo, consiguió numerosos triunfos en concursos musicales, renovando y optimizando tanto el repertorio del orfeón, como la música religiosa y ayudando al nacimiento de la ópera vasca.

A su fallecimiento, el pueblo de Bilbao decidió homenajear su figura levantando un monumento en el Parque de Doña Casilda Iturrizar, junto al Museo de Bellas Artes de la ciudad. Quintín de la Torre, encargado de esculpir la escultura, aunó en su estilo la influencia de los escultores modernos como Rodin y Meunier con la de la imaginería clásica de la escuela de Valladolid. En esta obra, Quintín de la Torre diseñó un frontis en piedra de sillería, ante el cual, y sobre una repisa, se alza una figura alegórica realizada en mármol blanco. Bajo la repisa hay una escalinata de cuatro peldaños y dos máscaras blancas. La escultura está rodeada por un pequeño estanque. En el frontis se puede leer una inscripción que dice "AL MAESTRO / DN AVRELIANO VALLE" (derecha de la escultura) y "DIRECTOR / DE LA SOCIEDAD CORAL / DE BILBAO" (a la izquierda de la escultura). En el hueco del frontis se representa una lira mediante una ligera cortinilla de agua.

La obra fue financiada por suscripción popular, auspiciada por la Sociedad Coral bilbaína e inaugurada el 28 de mayo de 1922. La escultura fue restaurada en 2003.  

Ana Prado